El lunes 4 de noviembre, el Centro UC de la Familia se reunió con el abogado chileno, miembro de la ONG francesa Juristes pour l'Enfance y coordinador de la Declaración de Casablanca para la abolición universal de los vientres de alquiler, Bernardo García. Durante el encuentro, el abogado compartió su experiencia y conocimientos, abordando los desafíos legales y éticos que implica la maternidad subrogada desde una perspectiva internacional.
La conversación giró en torno a las diferentes aristas fundamentales de la maternidad subrogada, tales como la protección de la infancia y los derechos de las mujeres. Los participantes de esta instancia fueron: Carolina Salinas, Directora del Centro UC de la Familia y profesora de Derecho UC; Angelina Dois, profesora de la Escuela de Enfermería UC y miembro del Comité Ejecutivo del centro; Cristián Borgoño, sacerdote de la Arquidiócesis de Santiago y profesor de Teología UC; Carmen Domínguez, profesora de Derecho UC y miembro del Comité Ejecutivo del Centro UC de la Familia; Nicole Elizondo, investigadora del mismo centro; José Tomás Alvarado, profesor del Instituto de Filosofía UC y miembro del Comité Ejecutivo del centro; Matías Rojas y Camila Ginouves, ayudantes del Centro UC de la Familia.
Bernardo García, por su parte, se refirió a la explotación de mujeres en situaciones de vulnerabilidad a lo largo del mundo y a la mercantilización de la vida: “Es fundamental que se llegue al consenso en decir que los niños no son objeto de contrato y las mujeres no son medios de producción”. A su vez, el abogado recalcó la índole global que tiene esta temática hoy en día a través de ejemplos de explotación en lugares como Ucrania, India y Colombia, “la maternidad subrogada es intrínsecamente un fenómeno internacional (…). Un tema global tal como lo es algo como el acceso al agua”.
Durante el encuentro, García compartió la experiencia que tuvo recientemente con el Papa Francisco en la promoción de la Declaración de Casablanca para la abolición mundial de la maternidad subrogada, la cual hasta el momento es defendida por 100 expertos de 75 países diferentes. “El Papa está muy consciente de este tema; de hecho, en sus términos, esto es un verdadero mercado”, afirmó García. Asimismo, explicó que si bien se aspira a un tratado internacional que sea promovido por los diferentes Estados, la invitación que realice el Papa Francisco –quien lleva años luchando contra los vientres de alquiler–, a la comunidad global es esencial para ayudar a abolir esta práctica.
Carmen Domínguez, profesora de Derecho UC y miembro del Comité Ejecutivo del Centro UC de la Familia, enfatizó en el mal uso del interés superior del niño en casos de maternidad subrogada tanto en el extranjero como en Chile, “Aquí hay indisponibilidad del cuerpo humano, no puedes celebrar negocios jurídicos sobre tu cuerpo salvo que la ley lo permita, pero igual lo hacen de facto. Luego, vienen los tribunales y lo conceden por el interés superior del niño, lo cual hace que nos saltemos toda la legislación vigente”.
La conversación contó con un análisis del modus operandi del mercado de la maternidad subrogada, donde la profesora Carmen Domínguez mencionó, “el mercado juega con un nivel reglamentario: como la ley no especifica, sí se puede hacer”. Ante esto, Bernardo García utilizó el caso de Francia para ejemplificar: “Allá el contratado es declarado nulo y hay delito, pero, el tema se vuelve complejo porque mucha gente va afuera y trae niños de vuelta”.
Sobre esto, la profesora Domínguez añadió que hoy en día, se entiende la maternidad subrogada como una nueva forma de filiación, no como una técnica de reproducción humana asistida. Carolina Salinas, Directora del Centro UC de la Familia y profesora de Derecho UC, estuvo de acuerdo con lo mencionado, “es muy conveniente para estas empresas que no sea considerada como una técnica de reproducción asistida”.
Al finalizar el encuentro, los participantes coincidieron en la importancia de continuar profundizando los estudios sobre maternidad subrogada, sobre todo desde una perspectiva interdisciplinaria.